El 22 de noviembre de 1989, con el recuerdo vivo de lo que significaba para esta ciudad y este país el asesinato de personas que fueron referente por sus ideales democráticos como Hector Abad Gómez, Leonardo Betancur, Luis Felipe Vélez o Jaime Pardo Leal; ilusionados con los cambios que ya venía generando la Perestroika en el orden mundial; emocionados con las imágenes todavía frescas de la caída del muro de Berlín y en plena promoción del movimiento de la séptima papeleta que dio lugar posteriormente a la Constitución del 91, un grupo de personas, muy jóvenes la mayoría, algunos con trayectoria en trabajo barrial y en los movimientos eclesiales de base, otros en el sindicalismo y en el movimiento estudiantil y otros simplemente convencidos de que el país requería transformaciones profundas a las que quizás podríamos aportar, fundamos la Corporación Región.