La Constitución contiene todos los elementos necesarios para posibilitarnos vivir en un Estado garante y en una democracia plural, pero su cumplimiento no ha sido del todo efectivo ni en su espíritu ni en su desarrollo normativo.
La transparencia y la promoción del control social de los bienes públicos, están entre nuestros valores, no solo para exigirlos a otros, sino también, para aplicarlos en nuestra organización; por eso cada año presentamos nuestro Balance Social y lo acompañamos de estrategias comunicativas que faciliten una amplia comprensión de nuestra actuación institucional.
Respaldar la institucionalidad de paz, la expresión más fidedigna del deseo de quienes por años padecieron el conflicto, es la manera en que, siguiendo con la etimología, podremos soldar y consolidar, en el sentido de “cerrar una herida”, para transformar lo vivido.
Con gran satisfacción presentamos nuestro Balance Social 2019, en el que compartimos las acciones más significativas de cada uno de los procesos que adelanta la Corporación y los aportes que desde estos hacemos para la construcción de una sociedad más justa, democrática y en paz.
Es necesario volver a sentarnos a la mesa, mirarnos a los ojos, reconocernos diversos y dejar circular la palabra y el argumento desde un profundo respeto por la diferencia.
Con el apoyo del Fondo Noruego para los Derechos Humanos, comenzamos un proceso de formación y acompañamiento psicosocial a 60 familias de personas dadas por desaparecidas en los municipios de San Rafael y Granada. Con este proceso, esperamos aportar a la reconstrucción, documentación y sistematización de 30 casos de desaparición forzada en estos municipios.
Es hora de pronunciarnos contra la ausencia de todas las personas a las que la guerra les ha arrebatado su identidad y, como sociedad, es el momento de exigir su derecho a ser buscadas. Es tiempo de hacer que la dignidad, la solidaridad y la búsqueda sean un clamor de toda la ciudadanía.
...la verdad nos interpela pues finalmente hay preguntas muy hondas por responder: por qué como sociedad, permitimos que esta guerra sucediera; por qué guardamos silencio frente al sufrimiento, las pérdidas y el despojo de millones de personas; por qué la institucionalidad y el Estado de un régimen democrático faltó a lo esencial: la protección de su ciudadanía.
...si la sociedad insiste en la memoria y la búsqueda de la verdad, como ejercicio de conciencia y de tributo a las víctimas, producidas por la misma sociedad -no solo por unos grupos armados- puede tener una ruta para garantizar la no repetición.
Por: Lucía González, Comisionada de la Verdad