En un contexto donde la pervivencia de estas organizaciones es cada vez más adverso, examinamos las posibilidades de seguir existiendo. Tenemos claro que el principal factor de sostenibilidad es social y político y tiene que ver con el sentido de lo que hacemos; por eso este aniversario ha sido, como hace 30 años, un llamado a conversar, a hacernos las preguntas pertinentes, a mirarnos a los ojos y ver la hondura de la incertidumbre, pero también de la esperanza.
Hoy nuestro llamado es a evaluar este proceso electoral en clave de las preguntas que nos deja. Aquí exponemos algunas, pero seguramente cada sector, cada organización, cada individuo tendrá las suyas. Y una invitación: generar espacios colectivos para esta reflexión como una pista para lo que sigue.
Creo que otra ciudad es posible, por ello escribo para recordar que, escuchar al Movimiento social de derechos humanos de Medellín, es una exigencia ineludible para cualquiera que llegue a gobernarla.
De plano es importante reconocer que nuestro principal desafío educativo no está, como se cree, en mejorar los puntajes de las pruebas estandarizadas. No podemos confundir los fines con los medios; la forma de medir el logro no puede ser el eje estructurante de una apuesta educativa, que como sociedad debemos construir.
...deberíamos exigir a los candidatos y gobernantes que asuman también, el reto de tomar decisiones informadas y explicarlas, diciéndonos cuál es el factor que con su propuesta pretende remover; por qué ese factor es determinante de un problema de inseguridad; qué medios ha seleccionado para intervenir y por qué los considera adecuados.